El álbum

A veces mil pensamientos gritan intentando hacerse oir en nuestra mente, intentando captar nuestra atencion y estorbandose unos a otros, los hay ruidosos, los hay alborotadores, y los hay silenciosos, todos y cada uno de ellos guardan un secreto, un recuerdo o el germen de una idea que sin duda condicionara nuestros actos, cuando no consigo poner orden a esta manifestacion de mi razon, me bajo a la piscina, me zambullo en el agua, y dejo que esta me mantenga a la deriva. Con el sonido amortiguado por el agua que separa mis oidos de la realidad y el calor del sol acariciando mi rostro, anego mi existencia con un pequeño reducto de paz en el que solo yo existo. Aqui donde yo soy el unico habitante, mi mente se transforma en un compañero de viaje que me habla como si de una tercera persona me tratara, y es aqui donde hoy mi mente consiguio hacer que una pregunta destacara sobre otras muchas:


¿Cambiarias estos tres ultimos meses de tu vida?


La pregunta no me sorprende, pero si lo que provoca en mi. Curiosamente en mi mente no renacen malos recuerdos y los hay, si no que, como si de album de fotos de se tratara, me encuentro pasando paginas en las que no se ven caras tristes, me detengo en cada una de ellas, las observo, las analizo, y me deleito con lo que me hacen sentir. Descubro lugares de fantasia, compañeros de viaje que volvieron para quedarse, y otros nuevos que ya son casi protagonistas de mis historias, descubro que por cada puerta que se cierra se abre una ventana, y me descubro a mi saltando al vacio por ellas, descubro que no salto solo, que voy acompañado de los que siempre estuvieron alli, de los que de cierta manera nunca se fueron, aunque no fuera capaz de verlos ellos a mi no me dejaron de mirar, y los descubro sonriendo, sin miedo y felices de compartir el viaje conmigo.


Si tengo que contestar esta pregunta, no lo dudaria, la respuesta es no, he saltado, y quiero descubrir que hay al final del viaje. ¿Me acompañais?




Nota: Dedicados a todos aquellos que siempre estan dispuestos a ser coprotagonistas de los capitulos de mi vida.